Este blog está dirigido a los alumnos del Taller de literatura del Patronato de Cultura de Pozuelo de Alarcón
lunes, 17 de agosto de 2015
Rafael Chirbes
No me gustan las necrológicas, pero la noticia de la muerte de Rafael Chirbes, un escritor al que llegué por recomendación de Marisa y del que leímos una obra hace unos cursos, me ha afectado especialmente. Quizá por lo repentino, aunque habitualmente las muertes de personas alejadas de la popularidad suele ser conocida así. O quizá porque el día anterior había estado buscando alguna novela de sus primeros tiempos para un regalo. O simplemente porque tenía prácticamente mi edad. El caso es que me apetece comentar su desaparición y recordar las obras suyas que he leído.
Marisa me recomendó hace unos años, Los viejos amigos. Después vi en Canal+ la serie sobre su novela Crematorio, una buena serie que me animó a leer la novela, su mejor novela, muy superior a la serie. En el curso leímos La buena letra, una de sus primeras novelas, que ya dejaba ver su estilo, un tanto personal. Y, por último, En la orilla, en que volvía al mundo de Crematorio, mucho más desencantado todavía, y que no alcanzaba, en mi opinión, la calidad literaria de Crematorio.
Chirbes hizo en sus obras, primero, un análisis de la España surgida de la guerra civil, y después, de la transición. Un análisis absolutamente desencantado. "A mí no sólo no me gusta este país, sino que me da miedo", decía en una entrevista en 'El Cultural'.
Como el mejor homenaje a un escritor, es leer sus obras, hagámoslo. Y si no lo habéis hecho todavía, leer Crematorio. Vale la pena.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Gracias Joaquín. Chirbes es pura Literarura. Y como tengo pendiente Crematorio, tras la monumental y envolvente En la orilla que me fascinó, me dirijo a ella contribuyendo a este homenaje tan acertado.
ResponderEliminar