El guión mantiene la estructura de la novela de Pisón en la que vamos conociendo la ambigua personalidad del protagonista, Justo Gil, a través de los testimonios de varios personajes ( trece en la novela) que tuvieron contacto con él en distintas épocas de su vida, respetando un orden cronólogico de los acontecimientos personales e históricos, esta estructura ya es en sí muy cinematográfica recordemos Ciudadano Kane, La condesa descalza o Cautivos del mal entre otras.
La acción transcurre en la Barcelona de los años 60 y 70, años del tardofranquismo y de la llegada de la manida y ahora muy cuestionada transición democrática, esa Barcelona de acogida de inmigrantes de otras provincias, de esa burguesía catalanista pero franquista cuyos hijos derivaron a posiciones más críticas pero sin excesivo compromiso, la llamada " gauche divine" de Bocaccio y los grupos comprometidos que actuaban en la clandestinidad sobre todo partido comunista y sindicatos, en conjunto toda una sociedad resignada ya a ver morir al dictador en su cama y que se va posicionando para desmarcarse del regímen y acomodarse a la nueva situación.
Justo Gil (Oriol Plá ) es uno de esos jóvenes, ambicioso y pueblerino que llegaron a Barcelona para mejorar , su estimulo es ganar dinero pronto y como sea para curar a su madre prácticamente en estado vegetativo, le falta cultura pero le sobra ambición y encanto personal, es un embaucador nato con pocos escrúpulos, un personaje que recuerda mucho a los del novelista Juan Marsé y muy en la línea de otros de Pisón que siente empatía por esos tipos entre pícaros y estafadores que siempre bordean la ley y en el caso de Justo un poco fatalista, Justo pasa de la zamarreta a los buenos trajes, de compañias burguesas a ser confidente de la policía espiral que le lleva a moverse en círculos de ultraderecha sin ninguna convicción su trayectoria va del escepticismo a cierto misticismo, que en la novela se refleja en las lecturas de los místicos y en la filosofía de Vintila Horia olvidado escritor filofascista rumano que tan bien acogimos en España.
Un reparto muy acertado con Oril Plá en el papel de Justo, Aura Garrido en el de Carme Román, Karra Elejalde en un papel a su medida el comisario Landa y sobre todo me ha gustado el desparpajo y cinismo de Jesús Carrera en el papel del policía Mateo Moreno.
Os recomiendo leer la novela ,se disfruta mucho más después de ver la serie y se conoce mucho mejor a todos los personajes ,sobre todo a Justo, Carme y Mateo ,tres seres que son unos supervivientes, que tienen en común una cierta orfandad y un desarraigo con esa ciudad Barcelona que es un personaje más de esta historia.
Me ha parecido una serie notable. Probablemente la mejor de las producidas por Movistar+ (La peste, La zona, Félix...). No me gusta especialmente Martínez de Pisón. aunque como tu sugieres y por iniciativa propia, estoy leyendo esta novela.
ResponderEliminarUna rectificación, el actor que interpreta al policía es Jesús Carroza, no Carrera, al que recuerdo destacando en El niño, la película de Daniel Monzón.