No se sabe si como reacción ante la decisión de Donald Trump de impedir el acceso a los ciudadanos de algunos países, entre ellos Irán, a los USA lo que dio lugar a la ausencia de su director en la ceremonia de los Oscar, los académicos del cine han premiado El viajante, con dirección y guion del iraní Asghar Farhadi con el Oscar a la mejor película en lengua no inglesa. Este director ya había ganado el Oscar de esta categoría hace unos años con su excelente película Nader y Simin, una separación. Después había dirigido en Francia El pasado, una película que fue objeto de comentarios muy contrapuestos en este blog.
El viajante había estado presente en el Festival de Cannes donde fue premiada como mejor guion y mejor actor.
Ante el peligro de derrumbe del edificio en el que viven, Emad y Rana se ven obligados a mudarse a otro lugar. Una vivienda que aún guarda los enseres de su anterior inquilina. El es profesor en un instituto y ambos comparten su pasión por el teatro formando parte del reparto de la representación de la obra Muerte de un viajante, de Arthur Miller. Pero su relación se ve alterada cuando Rana sufre una agresión en su nuevo domicilio.
La película nunca nos cuenta lo que ocurrió realmente cuando Rana fue agredida. Lo que nos cuenta son los efectos de esa agresión. La duda de si realmente fue una agresión sexual, que ella niega, o simplemente ( y ya es mucho) una ruptura de su intimidad. La película nos deja una serie de datos contradictorios difíciles de entender cuando conocemos la identidad del agresor. La personalidad de la anterior inquilina del piso, de dudosa reputación en la vecindad, hace pensar que el agresor podría ser un "cliente" confundido.
El caso es que no es precisamente el guion, premiado como he dicho en Cannes, lo que me gustó de la película, no tanto por que no aclare lo sucedido sino por lo contradictorio de las circunstancias en que se desarrolla la agresión y la pretendida relación entre los hechos narrados y la trama de la obra teatral que representan.
¿Cuales son los temas de la película? Para mí la humillación de Rana y la investigación y la venganza de Emad. La humillación de la protagonista que la lleva a no querer denunciar ante la policía los hechos, para evitar la culpabilización de la víctima, una postura perfectamente comprensible en una sociedad machista donde la mujer está lejos de alcanzar una situación normal. (Algo que no ha dejado de ocurrir en sociedades mas desarrolladas, como se considera la nuestra, a juzgar por algunas sentencias judiciales). Y la venganza de Emad, que Rana no desea, más de carácter moral que físico, pero que puede llevar a un trágico desenlace. Como dice su director, se puede tomar como un comentario social, pero también enfocarlo desde la perspectiva de un cuento moral. Lo único seguro es que la película trata de la complejidad de las relaciones humanas, sobre todo en el seno de la familia. Y es el desarrollo de estos dos temas lo que me gustó de la película.
Buenas interpretaciones y un tema interesante, pero lejos, en mi opinión, de los méritos de Una separación. Y con el mérito añadido de haber evitado que la gran favorita, la para mi poco afortunada película alemana Toni Erdmann, se llevara el Oscar.
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